¿Y SI ES UN DOLOR BUENO?

Elena no era una experta en sentimientos, pero hubo un tiempo en el que eso era diferente.

Nunca supo el porque de esa auto distancia con lo que la rodeaba, un tonto motivo no podía ser el culpable de eso.

El como había sido el transito de su mente para la transformación que la llevaría a lo que hoy era, siempre le resultaba un misterio.

¿Realmente había sufrido tanto como para sentirse así?

La distancia entre ella y el mundo se había hecho grande.

Ella nunca entendió demasiado de lo que veía, pero siempre pretendió comprender un poquito de toda esa vida extraña por la que era rodeada, aunque no lo consiguiera tal y como ella habría querido.

Solo necesitaba estar segura, sentir que merecía la pena el riesgo.

Las personas son complejas, pensaba, y difíciles de entender en la mayoría de los casos.

Porque cuando comprendes que no siempre las cosas que crees son verdad, es cuando se hacen patentes las dudas.

La seguridad es importante, esa era la obsesión de Elena.

Para ella, confiar requería de eso, de una patológica seguridad que sabía nunca tendría. 
La completa seguridad sobre algo es imposible.
Y eso la abocada continuamente al fracaso.

Confiar no es una ciencia, es una forma de fe.

Pero la fe no era para Elena.

La perdió, y una vez la pierdes resulta difícil volver a encontrarla.

Confiar en que todo saldría bien, y descubrir poco después que no será así, te puede partir el corazón.

Para Elena, esa fractura era algo con lo que creía podía vivir.

Ella aunque no entendiera demasiado de sentimientos ajenos, si lo hacía, o así lo creía, de los propios.
Creía saber hasta donde podía llegar para no hundirse más.

Y sin apenas darse cuenta, su acto de vida rompía poco a poco el hilo que mantenía aletargada su herida cosida. 

Pero Elena no lo sabía, ignorante pretendía curarse no haciendo nada que la expusiera.

Así no seré dañada, pensaba pero.

El amor puede dañar tanto como curar, la ausencia de el simplemente nada hará. Por lo que la herida que una vez se abrió, así, nunca jamás se cerrará.

"Ten corazón y ponme a prueba, porque sin amor no sobreviviré" 

Y ella se confiesa una y otra vez en soledad, no quiero perder más de lo que ya he perdido de mí, por ello me quedaré aquí...